Desde la llegada de la normativa Euro 6, son muchos los motores diésel que han incorporado el sistema SCR (Reducción Catalítica Selectiva) para reducir las emisiones contaminantes. Pero, ¿realmente sabes cómo funciona este sistema? ¡Sigue leyendo para conocer más sobre el funcionamiento del SCR y otros detalles interesantes sobre su uso en los motores diésel!
Indice de contenidos
¿Qué es el sistema SCR?
El sistema SCR ayuda a reducir las emisiones al tiempo que mejora la eficiencia del combustible tanto en coches como en camiones. Básicamente, regula las emisiones producidas por los motores de combustión interna mediante una eficaz reacción catalítica que convierte los óxidos de nitrógeno tóxicos en vapor de agua y nitrógeno inocuos.
Además, tener instalado un sistema SCR eficaz tiene muchas ventajas, como ayudar a proteger el medio ambiente de contaminantes peligrosos y a ahorrar dinero en combustible al aumentar el kilometraje total al conducir, entre otras. Sobre estas ventajas hablaremos más adelante.
Funcionamiento del sistema
Los catalizadores de reducción SCR necesitan alcanzar una temperatura de unos 200ºC para comenzar a funcionar correctamente. El agente reductor AdBlue es bombeado con una presión de 5 bares hacia el inyector del sistema gracias a la bomba. La unidad de control del motor es la encargada de controlar el inyector para que inyecte una dosificación en el tubo de escape.
Durante el trayecto hacia los catalizadores de reducción, el agente reductor es diluido uniformemente y se descompone en amoniaco (NH3) y dióxido de carbono (CO2). En los catalizadores de reducción, el NH3 reacciona con los óxidos de nitrógeno produciendo nitrógeno y agua. La eficacia del sistema SCR es recogida por el sensor de NOx. Con el sistema SCR los vehículos diésel pueden cumplir con los estándares de emisiones más exigentes y mejorar la calidad del aire.
¿Qué es el AdBlue?
El AdBlue es un líquido de vital importancia para los motores diésel modernos. Este compuesto químico es disuelto en agua y se inyecta directamente en los gases de escape para neutralizar los óxidos de nitrógeno nocivos.
El proceso de hidrólisis convierte el AdBlue en amoniaco, que luego se combina con la tecnología SCR para reducir las emisiones contaminantes en los automóviles y camiones que utilizan esta tecnología. Aunque su funcionamiento es sencillo, el AdBlue es un componente esencial en la lucha contra la contaminación del aire. Y, sin duda, es una muestra del avance tecnológico en la industria automotriz.
¿Quién está obligado a utilizar un sistema SCR?
Desde hace más de una década, España ha formado parte del movimiento global que busca reducir la emisión de gases contaminantes que los vehículos diésel expulsan al medio ambiente. Aunque inicialmente no se hacía uso de la tecnología SCR de forma obligatoria, hoy en día es indispensable.
Desde el 2014, es necesario contar con un reductor AdBlue para poder adquirir un vehículo diésel nuevo. Y, a partir de la normativa EURO6, quienes tengan vehículos antiguos deberán conseguir esta tecnología para que sus coches sean menos contaminantes.
Las medidas que se han venido tomando para cuidar del planeta son esenciales y, sin duda, el uso de tecnología SCR y reductores AdBlue ha marcado un antes y un después en la historia de la circulación en las carreteras españolas.
El papel del sistema SCR y el AdBlue en la reducción de la contaminación
Tanto el sistema SCR como el AdBlue son herramientas increíblemente eficaces para reducir el impacto medioambiental de los vehículos diésel. Además de reducir drásticamente los óxidos de nitrógeno, esta tecnología también ayuda a reducir las partículas en suspensión en el aire y a mejorar la calidad del aire.
Además, el uso de un sistema SCR puede ayudar a los propietarios de vehículos a ahorrar dinero al aumentar la eficiencia del combustible. Esto se debe a que el sistema reduce la carga del motor y mejora la combustión, lo que se traduce en un menor consumo de combustible.
Por último, el uso de un sistema SCR puede ayudar a prolongar la vida útil del motor al evitar la acumulación de partículas corrosivas en los gases de escape diésel. Todas estas ventajas hacen que tener un sistema SCR eficaz sea imprescindible para cualquier propietario de un vehículo diésel moderno.
Cambios que contribuyen a fomentar una movilidad más sostenible
En general, el sistema SCR es una solución técnica esencial para el postratamiento de los gases de escape y ofrece una forma rentable de reducir las emisiones. Al invertir en este sistema, los conductores pueden seguir cumpliendo la legislación vigente y, además, promover el desarrollo sostenible a largo plazo. A medida que más países se unan a esta lucha contra la contaminación, las soluciones innovadoras como los SCR serán uno de los muchos pasos que debemos dar todos juntos para salvaguardar nuestro medio ambiente para las generaciones futuras.